Bhatia y el Supremo

Vimos ayer un espectáculo denigrante tanto para la integridad del Senado de Puerto Rico como para la propia Jueza Asociada del Tribunal Supremo Mayte Oronoz Rodríguez, cuando el Presidente de ese Cuerpo Legislativo tramito a modo “fast track” nada más y nada menos que la confirmación de la persona que presidirá el Tribunal Supremo de Puerto Rico por los próximos 30 años.  Para colmo, para justificar su acto acusa a los Jueces del Tribunal Supremo de tramar un “Golpe de Estado”.

¿Pero quién es Eduardo Bathia?  Eduardo Bathia Gautier nació en El Salvador, o sea, no es puertorriqueño de nacimiento.  Es hijo de Mohinder Bathia profesor hindú (de la India) y de Carmen Gautier Mayoral (PR).  Es sobrino de Doña Felisa Rincón de Gautier, Alcaldesa de San Juan por el PPD, quien a su vez era sobrina de un exalcalde de San Juan y esposa de Jenaro Gautier, Procurador General Asistente y Secretario General del PPD en aquel entonces.  Como pueden ver, creció en el seno de una familia muy bien conectada en el PPD y seguramente de niño creció oyendo los cuentos de su tía que seguramente serían los de los momentos de gloria del PPD, el ELA y Muñoz Marín y seguramente del papel protagónico de su propia familia.

Veamos ahora el historial del PPD:

• 1948, comenzó su hegemonía que se extendió por 20 años dominando las 3 Ramas constitucionales del Gobierno y el resto de las instituciones bajo su manto
• 1968, pierden la Gobernación, la Alcaldía de San Juan y la Cámara de Representantes
• 1977, pierden el Senado
• 1992, se retira de la política activa su ultimo verdadero líder, Rafael Hernández Colón
• 2004, siguiendo su tradición de designar por dedo (causa de su primer derrota) se impone a José Alfredo Hernández Mayoral como candidato a la Gobernación, al poco tiempo renuncia a su candidatura y prácticamente a su futuro político
• 2008, Aníbal Acevedo Vila se convierte en el primer Gobernador acusado en el Tribunal Federal, aunque fue encontrado inocente muchos de su colaboradores electorales fueron encontrados culpables.
• 2012, pierden la mayoría en el Tribunal Supremo
• 2016, pierden la máscara del supuesto pacto del ELA cuando tanto la Rama Ejecutiva como la Rama Legislativa del Gobierno de los EEUU hacen manifestaciones en el sentido de que PR es un territorio bajo la jurisdicción de la cláusula territorial de la Constitución de los EEUU.
• 2016, está pendiente de la Rama Judicial en el Tribunal Supremo de los EEUU un caso que podría culminar en la perdida de la supuesta soberanía judicial de PR, no en un caso planteado por abogados constitucionalistas anti-ELA sino en un caso de mera posesión ilegal de armas.  Esto completaría la opinión unánime de los EEUU sobre el estatus de Puerto Rico.

Si atamos ambos historiales que han transcurrido de manera paralela y a veces entrelazado podemos entender la actitud desesperada de Bathia.  Se ve en un partido donde la mayoría de sus compañeros en la Legislatura parecen ser mudos y si opinan es cuando son asuntos meramente político partidistas o en asuntos simpáticos electoralmente.  Lo dejaron solo en la reforma educativa, lo dejaron solo en el asunto de la reforma energética, solo en el sentido que se convirtió en el portavoz único ante la opinión pública.  Por otro lado, ve como su partido se ha dividido en 4 bandos:

• los estadistas “light”, ahí están los que defienden el voto presidencial y las primarias presidenciales
• los “soberanistas”, ahí están muchos líderes del partido que alegadamente son mayoría en los cuerpos directivos, sin embargo, las facciones más conservadoras siempre prevalecen de facto al momento de boicotear la política pública liberal que aprueban en convenciones.
• los colonialistas por ignorancia, ahí están la mayoría de los electores que todavía creen en la mitología Muñocista, y la leyenda del “pacto bilateral”, y por último
• los colonialistas por conveniencia, estos defienden la permanencia del “status quo” a pesar de que conocen la verdad detrás de la mitología Muñocista.  Estos están compuestos por aquellos privilegiados que de la propia boca de Muñoz conocieron la verdad detrás de la mitología.  Como sucedía en las sociedades secretas y elites de la antiguedad, este conocimiento privilegiado es pasado de boca en boca de padres a hijos.

O sea, que de las fantasías infantiles, juveniles y tal vez hasta universitarias, de aquel partido hegemónico a Bathia no le queda más que un partido quebrado en múltiples facciones y de aquel poder absoluto y totalitario de Muñoz solo le resta la Presidencia del Tribunal Supremo a la que ahora se aferra y pretende garantizar por las próximas 3 décadas.