PREPANET

Ha surgido en el debate público algo llamado PREPANET.  ¿Qué es PREPANET?  Por lo que he leído es una corporación subsidiaria de PREPA (AEE, en inglés) que aparentemente fue creada para ofrecer servicios de internet y otros relacionados.  ¿Es una corporación nueva? No, aparentemente lleva varios años de creada.

¿Porque se discute ahora su existencia?  Aparentemente hay diversos bandos que por distintas razones se oponen o favorecen que se desarrolle al máximo la capacidad de esta corporación para ofrecer servicios de internet a más personas, a precios más bajos y de mejor calidad.  Además, los que lo favorecen lo ven como una manera de ingresar fondos a AEE por sus posibles ganancias.  Los que se oponen entienden que es una competencia desleal porque PREPANET esta subsidiada por la AEE y por el Gobierno.

¿Quién tiene la razón?  Como pasa muchas veces, está a mitad de camino entre los puntos extremos.  ¿Si la AEE tiene la capacidad de ofrecer un servicio de internet a más personas y de mejor calidad porque no lo han explotado todavía?  Bueno, pensemos en la propia AEE, la AAA, y la Autoridad de Carreteras. ¿Cuál es su historia?  Se crea una corporación pública para desarrollar la infraestructura que el País necesita, se hacen planes, estudios, se implantan los mismos por varios años.  ¿Qué pasa cuando ya el progreso va desacelerando y simplemente se dedican a mantener lo ya construido?  Se convierten en botín de familias privilegiadas (ya sea desde afuera mediante contratos de servicio o privilegios en el servicio) o desde adentro (puesto ejecutivos y de confianza) ocupando posiciones con altos salarios y de autoridad para facilitar el tramite a los que están fuera.  Claro, estas personas son inteligentes y saben que tienen una mina de oro si saben administrarla, así que “comparten” sus privilegios con las uniones para que sus miembros gocen hasta de días “del astronauta”.  ¿Hasta dónde nos llevó esta práctica?  La AEE, la AAA y la ACT quebradas, aunque las familias privilegiadas siguen sobreviviendo. Un dato rapidito: la nómina de las compañías privadas que ofrecen el servicio de internet actualmente es de alrededor de $100M y unos 10,000 empleados, una simple división nos da un salario promedio de $10,000 anual.  ¿Qué empleado públicos tiene un salario similar?  Ni en el Gobierno Central y mucho menos en la AEE.

¿Cuál es la conclusión de porque no han explotado todavía a PREPANET?  Porque estas familias privilegiadas todavía no están al día en el ámbito del internet que es un campo que evoluciona a una velocidad tal que si ofrecieran un bachillerato en internet, al finalizar el grado ya los conocimientos del 1er año podrían estar obsoletos.  El internet y las redes sociales son el “futuro”, aunque hay quien diga que ya es el presente.  Así que los que deciden en PR pudieran entender que ya es tiempo de incursionar en PREPANET antes de que queden obsoletos o alguien invada su campo.  Así que crearán los puestos de Junta de Directores, Presidente, Director Ejecutivos, Director Auxiliares, Jefe de Relaciones Publicas y Comunicaciones (el lavado de dinero de la publicidad), etc., etc., etc.  Reclutarán personal que realizará las funciones que realiza el mismo personal que labora en el sector privado, se unionará este personal (la Unión de Trabajadores de Internet, la Industria Eléctrica y Riego, UTIIER) y se repetirá la misma jauja.  ¿Proyección?  Una vez comience a operar veremos en los noticieros las acusaciones, insinuaciones, rumores y las “supuestamente y alegadamente” irregularidades por contratos, ordenes de compras que se hinchan, falta de subastas y las excusas de los funcionarios y de los publicistas.  El ejemplo más reciente: la subasta de las máquinas para el escrutinio electrónico.  El Gobierno se mete en asuntos que no domina, y que muy pocas compañías ofrecen, resultado: una subasta de un solo postor, un segundo postor alegando corrupción y analistas insultando y acusando.  Mientras el Gobierno asigna millones de dólares a un gasto Innecesario la población sigue buscando como sobrevivir escuchando las acusaciones correctas o no de malversación de fondos públicos.

¿Significa que no debe explotarse PREPANET? No. Pero en este caso de una industria que ya está servida (bien o mal) por el sector privado y que aparentemente no ha invertido suficiente para ofrecer tecnología de punta en sus servicios unido a la capacidad tecnológica que posee el sector público sería un caso ideal para desarrollar una APP desde cero.  ¿Cómo podrían involucrarse ambos sectores?  Estoy seguro de que debe existir alguna manera en la que las compañías privadas que ofrecen servicios de internet puedan incluir entre sus servicios la capacidad de velocidad, confiabilidad, etc. que podría ofrecer PREPANET entre los paquetes de servicios que ofrecen sujeto a las tarifas correspondientes a cambio de compartir con la AEE un porciento de las ganancias, negociando quien se encargaría del mantenimiento, etc., etc., etc.

Otra opción, sería una similar a la de ASC (Asociación de Suscripción Conjunta) donde las compañías privadas crearían un consorcio para administrar PREPANET, ofrecer los servicios como un paquete de lujo que pagarían industrias, comercios y profesionales, en resumen, personas que necesitan y dependen de un servicio de internet confiable, rápido y que pueda transmitir grandes volúmenes de data y que actualmente se tienen que conformar con los servicios que comúnmente todos recibimos en nuestras casa para ver Facebook y YouTube.  Estos ingresos “de lujo” servirían para subsidiar el costo del internet normal que tiene un uso doméstico o recreacional.

Si esperamos a que PREPANET comience operaciones, se especule cuál es su valor, nos demos cuenta de que no podemos administrar a la velocidad que los cambios en la tecnología implican (como paso con Telefónica de Puerto Rico) se empezará un proceso de “liquidación” (estilo reforma de salud) donde surgirán las acusaciones de que tal o cual político cabildea a favor de tal o cual compañía, que si la mordida, que si se está regalando el patrimonio de Puerto Rico, etc., etc. etc., o sea, la misma historia que hemos escuchado múltiples veces.

Aprendamos de nuestra historia, no cometamos los mismos errores.