Durante décadas Puerto Rico ha
dependido para su desarrollo económico.
Inclusive, desde tiempos coloniales parte del oro que se exportaba de
las colonias de Sur América y México se dejaba en Puerto Rico. Con la llegada de los EU a Puerto Rico inversionista
de esa nación comenzaron a liderar la actividad económica de la Isla, siendo la
modalidad más reciente y “exitosa” la famosa/notoria Sección 936 del Código de
Rentas Internas.
Con el pasar del tiempo siempre
hemos identificado inversionista con personas no puertorriqueñas, llamémoslas
bonistas, accionistas, o con epítetos no tan políticamente correctos. Sin embargo, lo cierto es que la definición elemental
de inversionista es aquel que aporta fondos externos a la actividad que
pretende desarrollarse. Durante las
pasadas dos (2) décadas hemos pasado por alto, tal vez inadvertidamente o por
ignorancia, otro tipo de inversor, que puede aportar dinero externo a la economía
de Puerto Rico. Un inversionista que es
el mejor ejemplo del dicho “el mejor recurso de Puerto Rico es su recurso
humano”. Claro, cuando se habla de
recurso humano se habla del concepto tradicional de empleados, técnicos y burócratas
que trabajan para los inversionistas extranjeros.
Sin embargo, somos un país democrático
donde la esclavitud no existe, ni pretendemos exportar ninguna ideología política
como en su momento lo hizo Cuba enviando soldados a Africa a cambio de las
ayudas soviéticas o médicos y maestros a Venezuela recientemente a cambio de petróleo
barato. Así que Puerto Rico o su
Gobierno no puede obtener insumos de dinero externo a cambio de los servicios
de sus ciudadanos, más bien empresarios privados e individuales se benefician
de los recursos humanos que contratan y de manera indirecta mediante sus
contribuciones corporativas o individuales aportan a la economía de la Isla.
Tal vez se
preguntaran que tiene que ver el titulo de este escrito con lo que hasta ahora
he expuesto. Pues bien, les tengo una serie de preguntas a ver si van atando
los conceptos:
¿Cuando
piensan en personas con grandes ingresos que les viene a la mente? ¿Los legisladores, Richard Carrion, Ricky
Martin, algunos abogados criminalistas o artistas, los empleados de la AEE? ¿Que les parecería saber que una clase asalariada
de puertorriqueños muy bien pagada no trabaja en Puerto Rico y su paga no
proviene de fondos públicos ni los pagamos nosotros? ¿Qué les parecería si inclusive muchos de
nosotros hemos celebrado cuando un miembro de esta clase logra un aumento de
sueldo?
Espero que ya
hayan adivinado de quienes hablo. Los
peloteros de Grandes Ligas. Hagan un
ejercicio de memoria y piensen en cuantos anuncios de firma de contratos
escucharon durante los últimos años. Tal
vez, como yo, en su momento no llevamos un conteo de estos contratos ni la
cuantia de los mismos. Sin embargo, en
la medida en que la paga que se le da a los jugadores de Grandes Ligas es cada
vez mas inmoral me dio curiosidad de cuanto sumaban los contratos de nuestros
jugadores y algunos otros atletas que se reconocen que han obtenido buenos
contratos en sus deportes profesionales.
Les dare algunas alternativas a ver si adivinan:
- (a) $500,000,000
- (b) $750,000,000
- (c) $1,000,000,000
- (d) Mas de $1,000,000,000
No les voy a
dar el total, pero les incluyo la siguiente tabla con un listado de varios de
los atletas mejor pagados durante las pasadas dos (2) décadas y la cantidad
cobrada hasta este momento:
JUGADOR TOTAL
JJ BAREA $24,000,000
CARLOS ARROYO $24,000,000
JOSE VIDRO $30,000,000
RUBEN SIERRA $30,000,000
JAVIER LOPEZ $61,000,000
YADIER MOLINA $75,000,000
TITO TRINIDAD $75,000,000
MIGUEL COTTO $75,000,000
MIKE LOWELL $76,500,000
ROBERTO ALOMAR $76,800,000
IGOR GONZALEZ $87,000,000
JAVIER VAZQUEZ $99,400,000
BERNIE
WILLIMAS $103,000,000
JORGE POSADA $117,000,000
IVAN RODRIGUEZ $122,000,000
CARLOS DELGADO $146,000,000
CARLOS BELTRAN $205,000,000
Es posible que
en el pasado algunos de estos atletas han organizado actividades para apoyar
organizaciones sin fines de lucro. Sin
embargo, cuando sumen estos ingresos se preguntaran si la aportación que estos, y otros que se me hayan quedado, hayan hecho para promover el desarrollo de Puerto Rico es proporcional a estos
ingresos. Tal vez hemos escuchado mas
sobre la compra de mansiones, sobre todo en el extranjero, yates, divorcios y
pensiones alimentarias exageradas, bodas y noviazgos escandalosos que sobre la aportación
de nuestros atletas mas alla de organizar eventos de caridad y promover el
deporte del que se beneficiaron. Tal vez
sea injusto y ellos han aportado en silencio y anónimamente a las causas de
Puerto Rico, sin embargo, me pregunto, ¿por qué ocultar sus buenas acciones
cuando se hacen públicos los escándalos?
Durante los
pasados días he escuchado al Dr. Massol, profesor del Recinto de Mayaguez y uno
de los lideres de Casa Pueblo hablar de la posibilidad real de producir un sistema
de alumbrado que le ahorraría millones a la AEE (y por lo tanto a
nosotros), mencionó la posibilidad real
de exportar este producto, sin embargo, en algo que entiendo se ha fallado, al
menos en lo que he escuchado en sus entrevistas, es esperar que el Gobierno,
los Alcaldes o cualquier otro funcionario gubernamental los ayude. Cuando sumen, si no los han sumado ya, los
ingresos de los atletas de la lista, se darán cuenta de la gran oportunidad para
INVERTIR, no donar, no regalar, INVERTIR dinero, como los famosos/notorios accionistas
y bonistas, en el desarrollo de una industria que permita reemplazar las
luminarias de TODOS los postes de alumbrado de la AEE e inclusive exportar este
sistema a otros países.
