domingo, 29 de mayo de 2016

Sindrome de la Junta de Control Fiscal Federal

El Síndrome de la Junta de Control Fiscal Federal (SJCFF) es uno observado entre los políticos y sus seguidores habitantes de colonias semi-milenarias (500+ años) que luego de “lograr” un grado de autonomía termina volviendo a su estado colonial puro cuando la metrópolis imperial decide que los colonos no ha logrado administrar su territorio (el de la metrópolis) de manera adecuada.  Este síndrome presenta una combinación de síndromes muy raros (como rara ha sido la relación de la colonia con la metrópolis).

Para comenzar, una de las primeras manifestaciones del SJCFF afecta a la clase política de la colonia.  Se observa como esta clase sin quererlo acepta decisiones de la metrópolis que van en contra de su propia existencia y hacen negociaciones con líderes políticos de la metrópolis sin poder controlarlo.  Algo así como el síndrome conocido como “síndrome de la mano extraña” donde la mano (clase política) del paciente (colonia) cobra "vida propia". La clase política pretende tomar o manejar objetos (la Junta, las primarias presidenciales) sin quererlo o sin poder controlarlo.

En el proceso de justificar sus acciones, la clase política manifiesta una conducta similar a las que caracterizan al “Síndrome de Ganser” cuando son confrontados por los periodistas.  Este se caracteriza por responder a las preguntas de una manera llamativa, aproximada, sin sentido o evidentemente errónea.

Esto a su vez provoca que la prensa detecte en los políticos lo que se conoce como el “Síndrome de olor a pescado” o como dice un conocido periodista “me huele a peje e’Maruca” el cual es causado por la deficiencia de una enzima que pierde la capacidad para degradar la trimetilamina (TMA) lo que genera un fuerte olor a pescado liberado por aliento, sudor y orina. Una dieta libre de TMA (o una mayor honestidad y transparencia en el caso de los políticos) puede reducir los síntomas.

Aunque creo que a los políticos les va a ser muy difícil lograr ese nivel de honestidad y transparencia ya que muestran, además, los síntomas típicos del “Síndrome de Koro” ante la preocupación, miedo o creencia irracional, de que su pene (potencia, fertilidad, autoridad) se están reduciendo y van a desaparecer en breve (aunque en su caso no es tan irracional) al ver como la Junta los manejará como marionetas por lo que tendrán que seguir mintiéndole al pueblo ignorante que los sigue.

Una vez aprobada la JCFF veremos a los políticos como caníbales consumiendo los restos mortales del ELA lo que podría causar en estos el “Síndrome de Kuru” que puede producir la muerte por un ataque descontrolado de risa como se detectó en miembros de la tribu Fore de Nueva Guinea quienes adquirieron esta condición luego de comerse los restos de miembros fallecidos de su tribu.

Esperemos que el pueblo reaccione pronto y salga del sueño que nos hicieron vivir o de lo contrario podría ser víctima del Síndrome de muerte súbita inesperada (muerte repentina de adolescentes y adultos, a menudo durante el sueño).


No hay comentarios:

Publicar un comentario